Cómo mantener una piscina limpia en 5 pasos

Las piscinas son una gran solución para los meses más tórridos del año. No obstante, el poseer una piscina también requiere seguir unos cuidados para poder disfrutar de ella con total tranquilidad. En este post, vamos a detallar cómo mantener una piscina limpia y algunos consejos a tener en cuenta.

Tipos de piscina

Para empezar, hay que diferenciar los tipos de piscina con los que nos vamos a encontrar. Por un lado, puede tratarse de una piscina de obra o enterrada -son aquellas que se disponen en el suelo y se mantienen en el mismo lugar todo el año-. Por el otro, las piscinas de plástico o sobre el suelo son esas que desplegamos cuando se acerca el buen tiempo y las recogemos una vez que llega el otoño. Ambas necesitan de cuidados, pero varían según su tipología.

Como limpiar piscina

Piscinas de obra o enterrada

Para este tipo de piscina, habremos instalado previamente un sistema de limpieza que, a su vez, cuenta con un lado de succión y otro de retorno. El primero trabaja para llevar el agua sucia del vaso hacia la instalación de filtrado (filtro y bomba) mientras que la misión del segundo es devolver esa agua limpia de nuevo hacia la piscina.

En el lado de succión, nos encontraremos con los skimmers (cubos de plástico situados en el borde superior de la piscina cuya misión es desechar residuos más grandes como hojas, insectos, ramitas, etc.), el sumidero (ubicado en la parte del fondo del vaso de la piscina) y las líneas de succión (sistema de tuberías que llevan el agua hacia el filtro y la bomba, donde tendría lugar la limpieza del agua).

En el lado del retorno, encontraríamos las tuberías que llevarían el agua ya filtrada hacia la piscina (que llevan el nombre de líneas de retorno) y las boquillas de retorno (esos chorros situados en las paredes de la piscina que expulsan el líquido).

¿Cómo mantener una piscina limpia?

Además de todo lo anterior, debemos tener en cuenta algunos consejos de cómo mantener una piscina limpia:

Mantenimiento del filtro

En este caso, hay que tener muy en cuenta el mantenimiento regular del filtro, ya que es allí donde se va acumulando toda la suciedad del sistema y, por ende, es un potente foco de microorganismos.

Control del pH

También tenemos que llevar un control detallado del pH. El agua debe tener un pH que oscile entre 7,2 y 7. En el caso de que sobrepasase o no llegara a estos valores, las consecuencias podrían ser irritación en ojos y piel, deterioro de materiales, aparición de alguna infección…

Desinfección del agua

Desinfectar el agua de la piscina también es una de las claves de cómo mantener una piscina limpia. Al bañarnos en ella, dejamos sudor y suciedad que, con las temperaturas del verano, puede servir como caldo de cultivo para la proliferación de bacterias. De ahí su importancia.

Crecimiento de algas

Por último, evitar el crecimiento de algas. Su aparición lleva implícito que el agua se tiña de un color verdoso. Para ello, es importante realizar un mantenimiento continuo.

En este post, encontrarás más consejos para llevar a cabo una limpieza de piscinas estructurales.

Piscinas de plástico o sobre el suelo

Sin embargo, si tu piscina no es de obra, seguramente tengas de plástico o sobre el suelo. En ese caso, su correcta conservación es diferente. Continúa leyendo para averiguar cómo mantener una piscina limpia.

Este tipo de piscina, pensada para ser desmontada con la llegada del mal tiempo, ofrece la posibilidad de mantenerla sin depender de un robot limpiador. En este caso, dependerá también del grado de suciedad que se contemple.

En cuanto a remedios caseros, con la piscina vacía y si no hay aparición de algas todavía, podemos encargarnos de realizar la limpieza de paredes y fondo con un paño y la mezcla de vinagre diluida en agua tibia o jabón detergente. Si, por el contrario, el agua ya presenta algas y moho, podemos hacerlo directamente con lejía, teniendo especial cuidado en no dañar el plástico arañándolo ni pinchándolo.

5 pasos para preservar una piscina desmontable

Es importante realizar un buen desmontaje de nuestra piscina de plástico para mantenerla en óptimas condiciones para la siguiente temporada. Para ello:

1. Vacía el agua

Paso previo a llevar a cabo una vez que la temporada de verano ha finalizado. Tras su vaciado, sería el momento ideal para realizar la limpieza de paredes.

2. Desmonta la piscina

Comenzamos desarmando tubos y piezas, para continuar con la depuradora, guardando cada parte según las instrucciones del fabricante. Extraeremos la lona y la extenderemos en el suelo preservando que no haya piedrecitas que la puedan dañar.

3. Limpia el fondo

Seguiremos el mismo proceso que hemos realizado con las paredes ayudándonos de un paño y agua y jabón neutro.

4. Seca el bajo

Es importante que esté totalmente seco antes de guardarlo. Para prevenir la aparición de humedad u hongos, podemos hacer uso de polvos de taco, que también ayudan a su buena conservación.

5. Dobla el suelo y guarda

Doblar la lona suavemente y guardarla en una caja hasta su uso la próxima temporada será la mejor opción para llevar a cabo un buen mantenimiento de tu piscina desmontable.